Luis Castiglioni, líder de Vanguardia Colorada, habla de la necesidad de insistir en el diálogo interno en su partido. Reconoce que su disputa con Nicanor causó mucho daño a la ANR. Dijo que Lugo está debilitado políticamente y para el 2013 vaticina una disputa entre partidos tradicionales. –Hasta ahora resulta llamativo el acercamiento entre Castiglioni y Nicanor. A qué se debió el repentino cambio de postura de Vanguardia Colorada?
–Lo que hemos hecho es tratar de superar una etapa que ha causado mucho daño al Partido Colorado. En este caso bien puntual, mi diálogo con Nicanor, la capacidad que hemos tenido de superar un enfrentamiento que ha provocado bastantes problemas al coloradismo, se enmarca dentro de este trabajo de construir una unidad en la diversidad, una cohesión y la capacidad de entendernos por encima de nuestras diferencias coyunturales,
–Sin embargo, más bien parece que están armando un frente anti-Cartes.
–Definitivamente, no. Estamos muy contentos de que el señor Horacio Cartes haya decidido afiliarse al Partido Colorado y sumarse a nuestras filas. Lo conozco desde el 2008. Lo que pedimos es que todos se avengan a cumplir las disposiciones estatutarias. Aquí se ha hablado del respeto a la Constitución y las leyes, y nosotros pedimos que se respeten los estatutos partidarios que es la Constitución de la ANR.
Pero de la misma forma en que hemos hablado con el señor Duarte Frutos, también lo hemos hecho con Mario Abdo Benítez, con el señor Salemma, y no tenemos problemas en hablar con todos, porque lo que buscamos es fortalecer al partido, modernizarlo y demostrar a la ciudadanía que podemos ser de nuevo una opción de poder en el 2013.
–Se puso en duda su liderazgo al no poder convencer a Hugo Estigarribia de acompañar el juramento de Nicanor.
–Fue una decisión política del movimiento, una oportunidad de demostrar nuestra buena voluntad por una unidad partidaria. La persona que no asistió ha tomado una decisión personal; nosotros respetamos, estamos en un país libre.
–¿Fue expulsado Estigarribia del movimiento? –De ninguna manera; yo me enteré de su posición por la prensa. Me contaron además que se expresó de una forma bastante irrespetuosa hacia el movimiento y con palabras hirientes hacia mi persona. Yo lamento mucho porque nunca le falté el respeto a nadie, pero este ya es un capítulo cerrado para nosotros.
–Lo que este hecho está demostrando son algunos problemas internos en su movimiento que incluso podrían llevar al alejamiento del vicelíder.
–Esa es una patraña que nuestros adversarios quieren instalar. Al terminar las internas municipales intentaron manipular. Saben que somos una fuerza importante dentro del partido y la única chance que tienen es dividir. Los responsables de esta campaña son las viejas figuras del coloradismo, que no terminaron de irse, que se están reacomodando. El Partido Colorado necesita nuevos liderazgos; ellos ya pertenecen al pasado y tienen que dar lugar a las nuevas generaciones.
–¿Cuál es la postura de Vanguardia con respecto a la reforma del Poder Judicial planteado por el Ejecutivo? –Se tiene que dar dentro de un gran acuerdo y un firme liderazgo del Ejecutivo. Tenemos que ser conscientes de que en este momento no vemos las condiciones porque el Presidente esta aquejado de salud. Además, las primeras manifestaciones que vi por la prensa han sido muy vagas, muy generales; no hubo nada concreto. Si es solo para reflexionar, no sirve. –El Partido Colorado no participó de la reunión con Lugo en Mburuvicha Róga.
–Creo que el Partido Colorado tendría que asistir para escuchar qué plantea el Poder Ejecutivo, pero así como escuché, se quiere solo cambiar de nombres, y esto ya no resulta. Es necesario una enmienda constitucional para buscar sanear la Corte, el Jurado de Enjuiciamiento y el Consejo de la Magistratura. Pero eso implica una capacidad para liderar el proceso y consideramos que el Presidente podría hacerlo cuando se recupere de su salud, pero no ahora.
–¿Cómo ve al gobierno de Lugo en estos dos años y medio en el poder.
–Tienen enormes y grandilocuentes discursos, pero a la hora de la verdad dan cuenta que son presa de sus bajos instintos. Prueba de ello son los hechos de corrupción en Emergencia Nacional, el caso de la compra de tierras de Teixeira y lo último y más aberrante fue lo ocurrido en Tacumbú, donde estaban abusando de niños y niñas paraguayas. No se puede entender cómo el director y el ministro del ramo sigan tan campantes y sin asumir las responsabilidades políticas. El tan mentado gobierno del cambio no ha sido tal, más aún porque ha tenido serios problemas de liderazgos desde el principio. –¿Cómo ve el escenario con miras al 2013?
–Con seguridad, será una disputa entre los partidos tradicionales. El gobierno de Lugo será un punto de inflexión para el fortalecimiento del Partido Colorado, del PLRA y de los otros sectores. En nuestro caso, dependerá de la capacidad de diálogo que tengamos para unirnos y volver a demostrar a la gente que podemos ser una opción de poder.
El socialismo del siglo XXI
“El socialismo del siglo XXI ha sido un gran fracaso”, aseguró Luis Castiglioni. Dijo que el gobierno de Lugo al inicio intentó dar un giro con un fuerte sesgo ideológico hacia esta corriente liderada por el venezolano Hugo Chávez, pero ahora se tuvo que adecuar a lo que la ciudadanía quiere de sus autoridades. “Esta corriente ha iniciado un proceso de decadencia irreversible que terminará, espero, democráticamente en Venezuela y en otros países afines”, expresó el líder de Vanguardia Colorada. Dijo que el Paraguay no puede admitir el ingreso “del gobierno de Chávez” al Mercosur, porque el mismo busca impulsar su proyecto hegemónico a través del bloque regional.
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