lunes, 26 de enero de 2009

"Ya no teníamos los votos, y Lugo dijo: Que sea lo que Dios quiera"

El legislador fue fuertemente acusado por diferentes sectores porque supuestamente insistió al presidente para llamar a sesión extra, de manera a elegir al nuevo integrante de la Corte. Esto, a pesar de que no contaban con los votos necesarios.

"NO TE ESCUCHO BIEN, EL RUIDO DEL MAR ES MUY FUERTE", DIJO AL INICIO DE LA ENTREVISTA EL SENADOR ALBERTO GRILLÓN, DEL PARTIDO DEMOCRÁTICO PROGRESISTA (PDP). A un día de que su nombre sonara como uno de los mayores responsables de haber convencido al presidente Fernando Lugo para llamar a una sesión del Senado. El legislador ya se encontraba en playas uruguayas. "Ya tenía que estar con la familia, mi esposa me tenía amenazado", refirió, como justificando su apresurada ausencia del país.

-Respecto a la frustrada sesión del Senado, ¿cuál fue el error del Poder Ejecutivo?

-Para mí es una situación bastante delicada, en el sentido de que aliados se habían comprometido, a través de sus líderes, a participar de la sesión. No es nada agradable este tema, sobre todo para el presidente, que tuvo el coraje y las ganas de hacer respetar la Constitución Nacional.

-¿Quién le dijo al presidente Fernando Lugo que tenían los votos de los liberales Zulma Gómez y Alfredo Jaeggli?

-Debo ser responsable. No participé de la reunión del Consejo del Ministros. Sería irresponsable decir: fue mengano o zutano; pero es una cuestión de suma y resta. Cada uno tiene su sector. Nosotros estábamos trabajando entre senadores para hacer la convocatoria a través de un cuarto de los integrantes de la Cámara, que lo lograríamos con 12 firmas, pero el presidente sacó un decreto.

-Sin embargo, no tenían los votos de estos senadores...

-En un principio sí, pero luego cambiaron. Yo personalmente no hablé con Jaeggli ni con Zulma; eso lo hacía cada liberal dentro de su bancada.

-¿Esto fue un golpe del sector del franquismo?

-No sé. No quiero personalizar. Se faltó al compromiso ético con la Alianza. No quiero herir suceptibilidades y dar nombres.

-¿Por qué el apuro en llamar a la sesión extra si no contaban con los 23 votos?

-Hay un plan para que el 27 de enero el Poder Judicial elija la nueva mesa directiva, donde de nuevo el nicanorismo y el oviedismo van a querer administrar la Justicia.

-Patria Querida dijo que con Emiliano Rolón el presidente también buscaba una mayoría en la Corte...

-No queremos una Corte que esté a favor o a merced de los caprichos del Ejecutivo. Buscamos una Justicia independiente. Esta es una terna que ya eligió el Consejo de la Magistratura y no se puede seguir solo con ocho ministros.

-¿Por qué lo culpan de todo este apresuramiento?

-Desmiento categóricamente todas las acusaciones. No estoy pegado a ninguna silla. Fui electo por una cuestión coyuntural legal. No necesito del cargo para ser amigo de Lugo. Yo tengo un compromiso con él. Jamás le voy a hacer algo que le vaya a perjudicar.

-Lugo habría dicho que le tiraron a una pileta sin agua, según Jaeggli...

-Lastimosamente, debemos reconocer, la gente de Patria Querida decidió no acompañar.

-Pero ¿acaso PQ no aseguró que sus senadores no asistirían a la sesión?

-Mucha gente no está al tanto de todo. Se conversó con ellos para hacerles entender la importancia de que se llene la Corte, y confiamos en ellos.

-La diputada Desirée Masi dijo que el PDP podría sancionarlo por tomar decisiones sin consultas institucionales...

-La banca es del partido. La banca no es mía. No necesito de una banca para ayudar a este Gobierno.

-Yo a Desirée le tengo mucho aprecio, la respeto demasiado. Considero que ella se está equivocando en su percepción. A lo mejor los dos queremos la misma cosa, pero nos estamos yendo por caminos separados. No acostumbro a discutir a través de la prensa mis diferencias con mis amigos. Yo voy a hablar con ella personalmente. No necesito colgarme del saco de nadie.

-¿Podría perder su banca con la nueva mesa directiva de la Corte?

-Claro que puede pasar. No me extrañaría que lo hagan. El pueblo sabrá si esta gente viola de nuevo la Constitución. Ya sea en el caso de la banca de Jorge Céspedes (ANR) como en la mía. Pero ni muerto Lino Oviedo me va a sacar mi banca. También les tengo como enemigos a Nicanor y a Morales (Juan Manuel).

-¿Qué puede hacer para que eso no ocurra?

-Cuando eso ocurra, voy a recurrir a organismos internacionales. Cuando se solucionó el tema de mi banca, el secretario general de la OEA me envió una carta donde celebraba que se haya cumplido la voluntad popular.

-¿Qué opina de Zulma y Jaeggli?

-No son oficialistas, son de la oposición; así de sencillo.

-¿Qué dijo Lugo luego de la derrota en el Senado?

-Consideró un traspié más que una derrota. Voy a cometer una infidencia, pero cuando ya sabíamos que no teníamos los votos, Lugo nos dijo: "Que sea lo que Dios quiera, que sea lo mejor para nuestro país". Dijo que si no conseguimos votos, por algo será. Él estaba muy tranquilo. Yo, sin embargo, estaba desilusionado, porque me daba rabia que no cumplieron.

SUS FRASES

Ni muerto Oviedo me va a sacar mi banca. También le tengo como enemigo a Nicanor.

No necesito colgarme del saco de nadie para trabajar por Lugo. Cuando empezamos, éramos unos pocos.

Se comprometieron y no cumplieron. Innecesariamente dejaron que se llame a sesión.

No son oficialistas (Zulma y Jaeggli), son parte de la oposición; así de sencillo.

Fuente: UH Digital 26/01/09

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