martes, 4 de mayo de 2010

Los políticos y la Corte omiten al Consejo de la Magistratura

El órgano que selecciona candidatos a jueces y fiscales cada vez tiene menos importancia. La terna de candidatos a magistrados queda a la deriva o archivada. No hay apuro para integrar la Corte ni el TSJE.

El Consejo de la Magistratura perdió su capacidad de ser la institución que ofrece cierta seguridad a los aspirantes a magistrados del Poder Judicial, de la Justicia Electoral y del Ministerio Público. El Senado, el Poder Ejecutivo e inclusive la Corte Suprema de Justicia imponen sus criterios. Muchas propuestas del Consejo quedan a la deriva.

El titular del Consejo, Gustavo Mussi, se quejó porque el Consejo eleva las ternas a la Corte, de candidatos a jueces a cargos menores (jueces de paz, primera instancia y camaristas), pero el máximo tribunal prefiere llenar las vacancias con jueces interinos y no designar a los nuevos. Más de 40 ternas están guardadas en la Secretaría de la Corte.

Inclusive, Mussi dijo que piensa dar una opción, a los postulantes que están ternados y no son nombrados, de tener la posibilidad de renunciar y candidatarse para otros cargos. El Consejo no trató aún este planteamiento.

Sin embargo, el problema no se da solo sobre los cargos menores o que la Corte sea renuente a aceptar nuevos postulantes. El Consejo también pierde eficacia con respecto a los cargos del más alto nivel, como ministro de la Corte y miembros del Tribunal Superior de Justicia Electoral. En estos casos, los políticos se encargaron de restarle poder o el mismo Consejo se sometió a los intereses políticos.

En este contexto se observan dos casos: uno para la designación del reemplazante del ex ministro Wildo Rienzi, cuya terna quedó en el Senado, luego de que el presidente Lugo vetó a Agustín Lovera Cañete, candidato designado por la Cámara Alta. La vacancia en este cargo está por completar los tres años.

Otro caso es la terna para la elección del reemplazante del doctor Rafael Dendia, ex miembro del Tribunal Superior de Justicia Electoral, que el Consejo seleccionó el 24 de agosto de 2009 (gráfica de arriba) y Mussi decidió no enviar al Senado. El Unace (partido de Mussi) está interesado por el cargo que dejó Dendia, pero aún no consigue los votos en el Senado.

Mientras todo eso ocurre, la Corte funciona con dos ministros menos, porque Rienzi se jubiló y José Altamirano dejó el cargo por vencimiento de mandato en setiembre del 2009. El TSJE funciona con dos miembros desde la renuncia de Dendia en noviembre del 2008. Las decisiones políticas están por encima de las instituciones.

SE DILATA UNA NUEVA TERNA

Un total de 46 postulantes para un cargo de ministro de la Corte Suprema de Justicia sigue en concurso en el Consejo de la Magistratura.

El concurso se realiza para la designación del reemplazante del doctor José Altamirano Aquino, ex miembro de la Sala Constitucional.

El Consejo trabaja lentamente para seleccionar la terna de candidatos, después de haber realizado las audiencias públicas en el Aula Magna de la Universidad Americana.

Los consejeros no tienen apuro porque su tarea tiene estrecha vinculación con el calendario político.

Este año los senadores decidirán en "combo" las nuevas designaciones, como ser dos ministros de la Corte, un miembro del TSJE, un fiscal general del Estado y un contralor general de la República.

Nuevamente, el Consejo observa el movimiento de los políticos para saber si la terna que habrá tendrá aceptación en el Senado.

Los políticos realizan los nombramientos por cupos políticos y la selección de postulantes responde a ese criterio.

Fuente: Última Hora 4/04/2010

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