En la plenaria del 6 de abril pasado, los ministros de la Corte resolvieron confirmar en el cargo de juez penal itinerante de Pedro Juan a Cano Vargas. Los miembros del alto tribunal no tuvieron en cuenta los oscuros antecedentes del magistrado, que en principio incluso quedó fuera de la terna elaborada por el Consejo.
La confirmación de Cano Vargas evidencia que los ministros Raúl Torres Kirmser, Víctor Núñez, Sindulfo Blanco, Alicia Pucheta de Correa, Oscar Bajac y César Garay no tienen intención de mejorar la administración de justicia, que está cada vez más desacreditada.
Es una ofensa a la ciudadanía que un candidato como el señalado magistrado siga en la administración de justicia, más aun con la protección de algunos miembros de la Corte.
El ministro Víctor Núñez es el superintendente de la circunscripción judicial de Amambay. ¿Qué hizo para evitar que un juez muy criticado continúe en el cargo?
Fuentes judiciales incluso señalan que Núñez sería uno de los “padrinos” de Cano Vargas.
Los antecedentes del caso señalan que Cano Vargas quedó fuera de la terna en un principio. La lista fue conformada por los abogados Victoriano Caballero Alvarenga, Miguel Vicente Planás Ortiz y Simeona Solís Muñoz.
El currículum de los aspirantes había sido remitido a la Corte en junio de 2007. Sin embargo, los ministros de la máxima instancia judicial nunca analizaron el caso. La terna fue “cajoneada”, mientras se hacían las negociaciones en el Consejo para que Cano pueda volver a concursar por el apetecible cargo de juez penal de Pedro Juan Caballero.
El 2 de diciembre pasado, con la presidencia del oviedista Gustavo Mussi, el Consejo envío una nueva terna para el mismo cargo de juez penal itinerante de Pedro Juan Caballero. Esta vez sí estaba ya conformada por Modesto Cano Caballero junto a Victoriano Caballero y Miguel Angel Vicente Ortiz Planás. Estos dos últimos ya integraron la primera terna enviada al alto tribunal. La que renunció a dicha terna fue la abogada Simeona Solís Muñoz, quien sugestivamente apareció en la lista para juez de paz de Caaguazú Cua.
La conformación de las nuevas ternas habrían sido parte de una negociación en el Consejo de la Magistratura, en donde se habría ofrecido el cargo de jueza de paz a Solís Muñoz a cambio de su renuncia a la terna para juez de Pedro Juan.
Solís Muñoz aceptó el ofrecimiento, y en su lugar los consejeros metieron de nuevo para el “rekutu” al criticado Cano Vargas.
Toda esta maniobra evidencia a las claras que, con este tipo de procedimientos en el Consejo de la Magistratura, es casi imposible obtener las reformas que son urgentes en la administración de justicia. El organismo seleccionador de candidatos es una institución “clave” para los cambios en el Poder Judicial.
Si en el Consejo se impone una mayoría que traba la reforma, no se puede pretender los cambios en la administración de justicia.
Caso Genes
El criticado juez de Ciudad del Este Adolfo Genes Espínola es otro criticado magistrado favorecido por el Consejo de la Magistratura. Pese a que hace cuatro años tiene el mandato vencido, continúa en el cargo porque no se integra la terna para dicho cargo. Según fuentes judiciales, gozaría de la protección del ministro Núñez, superintendente en el Alto Paraná.
Genes estuvo primeramente en Filadelfia, Chaco, de donde fue trasladado a causa de las denuncias formuladas en su contra por pobladores de la zona ante el entonces presidente de la Corte, Antonio Fretes.
Luego fue juez de Salto del Guairá, aproximadamente por dos años. De dicho lugar también tuvo que salir por una serie de denuncias por mal desempeño. Estuvo en Hernandarias, época en la que fue denunciado ante el Jurado por el abogado Oscar Wasmosy.
Ante esta denuncia, fue trasladado a Ciudad del Este, en donde permanece pese a su cuestionada actuación. Había liberado al asaltante Vicente Adorno Paredes, alias Calandria. Fue enjuiciado por el Jurado, pero rápidamente liberado.
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