El jefe de Estado no definió hasta el momento a quién apoyará para la titularidad de la Fiscalía General del Estado. Su abogado personal y el asesor jurídico de la Presidencia defendieron sus postulaciones.
El ministro Emilio Camacho (asesor jurídico) y el abogado Marcos Fariña son hombres de confianza del presidente de la República y hoy están en disputa por lograr la bendición presidencial para la titularidad de la Fiscalía General del Estado.
Ambos postulantes consideraron que son conscientes de que requerirán del acuerdo político amplio no solo del Ejecutivo, sino del Consejo de la Magistratura y el Congreso para llegar a formar parte de la terna de candidatos.
Camacho y Fariña indicaron que informaron a Lugo sobre sus pretensiones. Sin embargo, hasta el momento, el jefe de Estado no definió a cuál de los referentes de su entorno apoyará para ubicar en reemplazo de Rubén Candia Amarilla, quien ya cumplió su periodo al frente del Ministerio Público.
Además de los dos postulantes, también se inscribió ante el Consejo de la Magistratura, el procurador Enrique García, quien tiene el respaldo del secretario general Miguel López Perito.
Al mismo se suman el ministro Humberto Blasco (Justicia y Trabajo), el viceministro Carmelo Caballero (Interior) y el director de la Caminera, Eduardo Petta, quienes también presentaron sus carpetas.
DESVENTAJA. Camacho manifestó la importancia de que exista una gran variedad de postulantes para la Fiscalía. "Es la mayor presentación que hubo en los últimos tiempos", resaltó el asesor jurídico.
Consideró que más que una ventaja de estar próximo al jefe de Estado, ese factor puede constituirse en un factor en contra por la fuerte presión política que genera el tema.
Afirmó que no hubo conversación con el presidente de la República para presentar su candidatura, ya que en un principio se había anotado para ocupar un lugar en la Corte Suprema de Justicia.
"Es una decisión personal. Lo importante es la decisión que tomen las instituciones del país. La proximidad que tengo con el presidente puede ser utilizada políticamente como un fuerte elemento en contra. Son las reglas de juego", aseveró.
Remarcó que tiene honestidad y coraje para enfrentar el cargo si es que es designado.
REQUISITOS. Por su parte, Fariña consideró que reúne todos los requisitos constitucionales para postularse al cargo. Dijo que se considera uno más de todos los candidatos que se presentaron para competir en el cargo, con todos los requisitos constitucionales.
"Todos tenemos la posibilidad de llegar a ser fiscal general del Estado. Ahora tendremos que esperar la decisión del Consejo de la Magistratura", aseveró Fariña, quien es de confianza por la defensa legal que llevó contra las demandas de filiación planteadas contra el jefe de Estado.
Afirmó que aún no tuvo oportunidad de conversar con el presidente de la República sobre su candidatura. "Se menciona que debe existir un acuerdo para llegar al cargo. No soy político, solamente un abogado. Estamos en la etapa incipiente. Se darán las audiencias públicas y luego tratar de buscar el apoyo", afirmó.
Explicó que tiene 10 años en el ejercicio de la profesión como abogado y asegura que cumple todos los requisitos.
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